Débora Goldstern en Radio El Mundo.

Entrevista realizada por Mystery Planet el: 12/07/2012
Nombre: Débora Goldstern
País: Argentina.
Profesión y/o Ocupación: Bibliotecaria. Escritora.
Autora de: "Cueva de los Tayos, mundo subterráneo perdido en América".
Sitio web: http://cronicasubterranea.blogspot.com.ar
Temas tratados en la entrevista: Tierra hueca; ciudades intraterrenas; almirante Byrd; cueva de los Tayos.

******* COMIENZO DE LA ENTREVISTA *******

Pregunta: En primer lugar, y para aclarar el panorama de aquel que no está muy informado del tema, ¿es la Tierra en su totalidad hueca? ¿O acaso no hay necesidad de esto para la existencia de ciudades subterráneas?

Respuesta: En mis inicios subterráneos la tierra hueca rondaba como una historia muy vinculada a este misterio, por lo cual decido hacer una investigación personal para comprobar su viabilidad. Como resultado nace “Tierra Hueca, madre de todas las conspiraciones” (2008), uno de los primeros monográficos en idioma español sobre el tema, donde sintetizo mi posición sobre esa realidad, la cual finaliza por ser negativa en su análisis. Paralelamente prosigo con la ruta subterránea centrando mis estudios en los Andes, donde comienzo a encontrar alguna evidencia al respecto llevándome a profundizar en los túneles, algunos de los cuales se localizan en cavernas y cuevas, que en ciertas regiones cordilleranas se conocen como chinkanas. Por el momento carezco de una respuesta que me lleve afirmar que estos socavones constituyen evidencias de civilizaciones subterráneas, aunque los datos recogidos apuntan hacia un enigma en cuanto a la identidad de sus constructores, los cuales no parecen corresponderse con las culturas tradicionales conocidas del continente sudamericano.

Pregunta: ¿Qué le llevó a crear su sitio web Crónicas Subterráneas, donde hace un gran compendio de historias e investigaciones al respecto?

Respuesta: En primer lugar la creación del blog responde a una necesidad personal, el de contar con un sitio donde se agrupen mis artículos e investigaciones. Su posterior orientación hacia los misterios subterráneos, comenzó primero por satisfacer un viejo anhelo que tenía como meta profundizar en un tema poco desarrollado por los especialistas, y que actualmente desde nuestro espacio se intenta no solo ahondar en el mismo, sino también clarificar algunas confusiones o malas interpretaciones acerca del “enigma de los enigmas”.

Pregunta:  Algunos relacionan lo intraterreno con lo infernal, ¿qué opina de esa comparación arquetípica?

Respuesta: Existen muchas formas de abordar el misterio subterráneo. Una de ellas tiene como eje principal a las religiones tradicionales, en especial Judeo-Cristiana, donde para esta última el infierno se interpreta como un espacio donde las almas pecadoras son aprisionada bajo una atmósfera opresiva, condenadas a un eterno castigo. Los judíos en cambio, llaman a este limbo infernal Sheol o Gehena, aunque menos vinculado a la estructura demoníaca potestad del catolicismo más ortodoxo, siendo considerado un lugar donde los espíritus de los muertos van a purificarse.

Desde el punto de vista bíblico, los ángeles caídos también están muy asociados con esta mirada subterránea, tomando como lectura apócrifa el libro Enoc, y que aunque este escrito no está reconocido dentro de los evangelios oficiales, figura como uno de los textos encontrados en los Manuscritos del Mar Muerto, dando pistas muy importantes sobre esta visión que ve a estos rebeldes angélicos, causantes de la “guerra del cielo”, como refugiados en el interior de la tierra, aunque otros estudiosos optan por una mirada menos literal abogando por una alegoría, que dicen tiene al “hombre descendiendo a la materia (Tierra) desde los planos celestes”, vista la Tierra como un planeta infernal.

Un segundo abordaje lleva hacia la vertiente “folklórica-mitológica”, donde lo subterráneo es potestad de héroes míticos en algunos casos, como el Tártaro o Averno griego. Dentro de esta realidad se inscribe el inframundo, tomado desde una perspectiva más lírica o espiritual, allí podemos encontrar el Duat egipcio, el Mictlán azteca, o Xibalbá maya.

Por último el tratamiento subterráneo encuentra en el esoterismo su máximo exponente, donde la iniciación es factor clave para introducirse en sus misterios.

Pregunta: En la ovnilogía desde hace tiempo se viene sugiriendo la existencia de pequeñas ciudades a modo de colonias, habitadas por seres reptiloides y ubicadas en el mundo intraterreno. Esta noción se basa en leyendas y relatos de varias partes del mundo y pertenecientes a diferentes culturas antiguas, que relacionan a estos seres con un mundo oculto debajo de nuestros pies. Según sus investigaciones, ¿qué credibilidad o interpretación merecen estos relatos?

Respuesta: No voy a negar que muchas leyendas circulan por el mundo acerca de este tema, incluso en Crónica Subterránea se recogen algunas de esas narraciones. Para entender la tradición reptiliana así como la adhesión que provoca aún hoy día, hay que remontarse al texto bíblico por excelencia, el Génesis bíblico, donde la serpiente irrumpe como protagonista absoluto en los inicios de la famosa saga Judeo-Cristiana.

Así como ocurre con el mundo subterráneo, la mirada reptiliana requiere de varios abordajes según las creencias practicadas. Siguiendo esta línea conductora, vemos que la esencia reptiliana encarna varios arquetipos, uno de los cuales es el factor serpiente asociada hacia lo demoníaco.

En las escuelas mistéricas, la serpiente en cambio, es el conocimiento revelado al hombre por fuerzas opositoras al plan divino, para despertarlo y hacerlo un igual a su creador, acelerando así su desarrollo. Como ejemplo de esta visión que se adentro en el esoterismo más puro, tenemos las diferentes encarnaciones del culto representada en el sacerdocio de antiguas civilizaciones. Egipto tenía a sus dragones, México Maya e India, a sus nagas. Los magos druidas herederos de la tradición celta, se decían a sí mismos, hijos de las serpientes cósmicas, denominaciones infinitas aunadas bajo un mismo propósito y propiedad común de todos los iniciados en este misterio.

Ahora bien, dejando de lado la tradición, vayamos a la alteración que desde hace un tiempo convierte a un símbolo tan comprometido en la psiquis humana, en el caricaturesco reptil, tan en boga en estos días. Uno de los principales culpables de esta deformación, hay que situarlo en las personales interpretaciones del desaparecido investigador de origen israelí, Zecharías Sitchin, quién a través de su controvertido “El doceavo Planeta”, 1976, desata una verdadera fiebre mundial con la historia de los Anunnaki, que según narra en el mismo, descendieron en un pasado remoto en el oriente mesopotámico fundando la primera civilización planetaria, y que según Sitchin creía tenían apariencia reptil. No intento aquí discutir el trabajo de Sitchin, el cual llevaría varios escritos desmenuzar, y del cual espero en algún momento explayarme, pero si remarcar su importancia e influencia en esta desviación, según mi punto de vista.

Otro estudioso que también contribuyó junto con Sitchin en el interés mundial sobre la cuestión reptil, es el británico David Icke, que a través de sus polémicas declaraciones sobre reptiles extraterrestres infiltrados actualmente en nuestra sociedad, cuenta actualmente con una legión de fieles seguidores, que consumen sus mensajes en conferencias, talleres, libros y donde Icke predica sin pruritos su evangelio reptiliano, que incluso bordea el racismo.

La problemática ovni también se vio afectada por esta influencia, dando como resultado que muchos contactados comenzaran a visionar “extraterrestres en forma de reptil”. En el caso subterráneo vinculado a lo reptil, la historia no varía, ya que si se excluye el esoterismo como factor introductorio e iniciático, el tema se reduce a narraciones legendarias inspiradas en bases poco sólidas.

Pregunta: Las tradiciones de las lamaserías tibetanas afirman que existen vastos espacios subterráneos en los cuales abunda una fuente de irradiación de energía que emite una especie de luminiscencia verde capaz de sustituir con ventaja los rayos solares. Éste tema se trata también en el libro “Tierra sin Tiempo” en donde el escritor Peter Kolosimo lo llama “Sol Esmeralda”. ¿Existe realmente un sol interno?

Respuesta: Más allá de la anécdota de Kolosimo, uno de los escritores que más respeto del género, la cita amazónica queda como un relato suelto sin posteriores investigaciones que ayuden a desentrañar la historia. Y esto se repite una y otra vez en el caso de la teoría de la tierra hueca, ya que hasta el momento es una realidad que en base a la bibliografía publicada no puede trascender más allá de lo ficticio, puesto es imposible tomar en serio la tesis, siguen faltando datos más substanciales. Y esto incluye la historia del sol interno, el cual no deja de ser una fantasía muy rentable, científicamente, no pasa el tamiz. Me cuesta imaginar un negativo de la tierra que como espejo se reproduce en su interior, lo dudo mucho.

Pregunta:  En muchos avistamientos OVNI, el o los testigos relatan que el objeto volador sale o se mete en montañas (por ejemplo el Cerro Uritorco) o en las aguas. ¿Cuál es la relación del tema intraterreno con el fenómeno OVNI?

Respuesta: Ciertamente este cerro cordobés así como los misterios que lo rodean, es uno de los temas que más convocatoria tiene dentro del imaginario subterráneo argentino, con Erks a la cabeza. Si existe una ciudad subterránea oculta en las inmediaciones del Uritorco, es una pregunta que en personal no cuenta con una respuesta, te diría y a riesgo de sonar repetitiva, faltan más pruebas. No niego sin embargo que existe un material muy abundante sobre algunos fenómenos en su mayoría de corte ufológico, que suelen rondar la zona, incluso, por mi lado, cuento con algunas fotografías muy sugestivas. La clásica escena de un ovni introduciéndose en las montañas, es una imagen muy observada tanto por los locales, de los cuales recogí personalmente testimonios, así como otros testigos independientes que aluden a esa realidad intraterrena, donde “seres extraños fueron divisados en las inmediaciones”.

Pienso es muy difícil tomar una postura sobre el tema, que en su versión objetiva termina cayendo en el escepticismo más puro; tampoco ese es el camino, y no se resuelve nada con la negación. Me gustaría en el futuro emprender una investigación más profunda, que hasta el momento no me fue posible realizar, lo siento como una asignatura pendiente.

Pregunta: Cuando se habla del tema subterráneo, es casi inevitable mencionar la posibilidad que haya un componente interdimensional o de “mundo paralelo” en el asunto. Vuestras investigaciones son conocidas por tener una gran postura crítica en cuanto a ese componente. ¿Por qué?

Respuesta: Desde que me inicié en los estudios subterráneos, una de las premisas que adopté fue buscar evidencias tangibles que ayudaran a validar esta realidad. Con el tema dimensional me pasa lo mismo que con la tierra hueca, por ahora son simples teorías, utilizadas por muchos como relleno a sus propias elucubraciones, a falta de datos más concretos.

Un ejemplo paradigmático es el caso Erks. Generalmente las veces que se me consultó sobre mi parecer a una supuesta vía dimensional de acceso hacia ese enclave intraterreno, señalé, que si existía una entrada, esta debería buscarse desde tierra y no desde ese plano, el cual por ahora no está comprobado, rozando incluso el mismo hasta el misticismo.

Se avanzaría más en la resolución de la existencia o no de Erks, si en vez de reducir todo el misterio al factor dimensional, se intentaran otras rutas, comenzando por la búsqueda de túneles subterráneos, de los cuales se dicen pueden existir, cerca de las faldas del Uritorco.

Pero para algunos hablar de una categoría dimensional o cuántica, resulta una postura más cómoda, ya que evita preguntas comprometidas, y apela al “negocio de los elegidos”, que sin una preparación especial, generalmente ofrecidas por ciertos “gurúes contactistas”, no les permiten penetrar a Erks. Negocios, son negocios.

Pregunta:  Es harto conocida la histórica empresa del almirante Byrd, quien, con su histórico vuelo de 1.700 millas más allá del Polo Norte y con su expedición de 2.300 millas más allá del Polo Sur, penetró en un nuevo territorio desconocido, no indicado en ningún mapa, de superficie mayor que la de América del Norte, compuesto por selvas, montañas, lagos, vegetación y vida animal. ¿A dónde llegó el Almirante Byrd realmente? ¿Cómo se condice lo relatado por Byrd con nuestro mundo físico tridimensional?

Respuesta: La historia del Almirante Byrd fue uno de los puntos fundamentales durante la redacción de mi monográfico sobre tierra hueca,  que mereció un capítulo doble: “El extraño periplo del Almirante Byrd” y “Arco Iris, ciudad de los blancos arios”. Allí pasé revista sobre una de las creencias más activas en el evangelio tierra-huequista, y que tiene al “Almirante” en el centro de la escena.  Siento decir que más allá de mis esfuerzos por desmitificar la visión errónea que sobre el mismo circula, no logré mi cometido, siendo el tema Byrd uno de los más convocantes, cuando se trata el tema de conspiraciones gubernamentales.

Aunque pasaron siete años desde la publicación de ese trabajo, sigo sin encontrar nuevos argumentos que ayuden a modificar mi opinión, aunque sin embargo para ser justa con los creyentes, existen algunos datos sobre el caso Byrd no incorporados en su momento en mi informe, y que valen la pena repasar. Uno de ellos proviene de Charles Berlitz, que en “Sin Rastro: los últimos descubrimientos acerca del Triángulo de las Bermudas”, 1977, recoge para su libro el testimonio de una tal Emily Ingram, quién contó al investigador que en 1926 escuchó por radio la transmisión del famoso vuelo del Almirante Byrd en su incursión al Polo Norte, donde éste declaró observar una hierba muy espesa, flores muy bellas, animales de aspecto similares a los de la megafauna prehistórica, así como la de presencias humanas, acotando: “parece que les sorprende ver un avión”.  En su análisis Berlitz especula que la visión de Byrd pudo responder a las aberraciones magnéticas, tan comunes en esa zona del polo, descartando el factor dimensional así como las especulaciones sobre una tierra hueca.

¿A qué lugar logró ingresar el Almirante Richard E. Byrd a través del polo?

Otro autor quién también trató la cuestión Byrd, fue David Tansley, que en “Mensajeros de la Luz” ,1977, apela al esoterismo de escuela para resolver la misteriosa observación del Almirante, que según la lectura del mismo, resulta aún más sorprendente que la sustentada por los seguidores de esa creencia. Como vemos la cuestión está lejos de aclararse, aunque las vías de resolución son muchas, y un tanto alejadas de la tesis esgrimidas por los así llamados defensores de la Tierra Hueca.

Pregunta: ¿Cuáles son las evidencias tangibles hasta ahora que podrían probar o al menos dar un indicio sólido, de la existencia de ciudades intraterrenas?

Respuesta: Por ahora esta posibilidad no está evidenciada tomando como ruta la Tierra Hueca. En cambio, si la vía orienta la cuestión intraterrena hacia la realidad esotérica, también cuestionada, podemos penetrar una puerta que lleva al buscador a sondear el misterio de las civilizaciones desaparecidas, en su mayoría no reconocidas por la historia oficial, las cuales dicen sucumbieron debido a terribles cambios de orden geológico, obligando a que sus supervivientes se refugiaran en socavones y cavernas del interior del planeta. Muchas de estas leyendas están muy vivas en las tradiciones orientales, así como del continente americano.

En mis propias investigaciones términos como Atlántida, Lemuria, Mu, Hiperbórea, surgen como vínculos  asociados al estudiar el misterio de construcciones anómalas en algunas regiones de Sudamérica, vestigios, que según opinión de especialistas y estudiosos de estas culturas, no se corresponderían con las civilizaciones tradicionales.

¿Significa que estas tierras desaparecidas guardan relación con este enigma intraterreno o mejor dicho de índole subterráneo? Carezco de una respuesta válida que lo certifique, aunque en lo personal es una pista que no descarto.

Pregunta: ¿Opina que estas ciudades están habitadas o son solo vestigios y ruinas de, quizás, una antigua civilización desconocida?

Respuesta: Como señalé en el punto anterior, me es muy difícil opinar si supervivientes de antiguas civilizaciones desaparecidas continúan una actividad de tipo subterráneo, lo cual incluiría, la existencia de vastos asentamientos internos. Más allá los rumores e historias que se tejen sobre este asunto, en lo personal tomo distancia de esta creencia, que como ocurre con la tierra hueca, no cuenta con suficiente evidencia. En cambio, la probabilidad de encontrar restos arqueológicos de estas culturas no oficiales, quizás lleguen a buen puerto, y personalmente no me rindo a la posibilidad de hallar algún día, alguna prueba sobre aquellos supuestos “reinos perdidos”.

Pregunta: Ecuador, Perú, Bolivia, Chile, Argentina… ¿Podría hablarnos de la conexión subterránea que los une?

Respuesta: La culpa de mi iniciación en este misterio, al que me gusta denominar “el enigma de los enigmas”, se debió a la Cueva de los Tayos, ubicada en territorio ecuatoriano, y de esto hace unos ocho años. Aquel tema fue el disparador de mi interés, dando cuenta por vez primera de estas construcciones ciclópeas construidas bajo tierra, y de la cual la historia oficial solo cita como parte de crónicas y leyenda datadas de los tiempos de la Conquista.

Débora Goldstern en Tiahuanaco.

Paralelamente al estudio ecuatoriano, tuve acceso a información sobre fortalezas subterráneas en el Perú a través de los trabajos realizados por mi colega y amigo, el investigador de origen español, Anselm Pi Rambla, a quién entrevisté en el 2010. En aquel reportaje, Pi Rambla contó toda su odisea en las excavaciones llevada a cabo bajo el antiguo templo inca, Koricancha, actual Iglesia dominica, en pleno corazón de Cuzco, donde se encuentra localizado un enorme túnel, noticia que adquiere trascendencia internacional, durante el período de aquellos importantes trabajos, años 2001-2003 y que debió suspenderse debido a presiones de índole local.

Mi pesquisa también buscó en Bolivia algunos de estos asentamientos internos, los cuales me fueron ratificados en mi visita a las ruinas de Tiahuanaco en el verano del 2010, datada según los últimos reportes en casi 17.000 años, convirtiéndola en una de las civilizaciones más antiguas del planeta. Esa cultura que considero considero una de las más avanzada de Sudamérica, guarda bajo sus pies importantes secretos subterráneos, entre ellos una inmensa pirámide denominada Akapana, donde en su interior fue detectado un túnel, y del cual poco se sabe, sin contar con otras revelaciones que seguramente espero pronto vean la luz.

Los bloques-H tienen la superficie tan lisa como la de un espejo, pesan 1.5 toneladas (!), y fueron cortados desde una roca volcánica increíblemente dura. Si en estos tiempos quisiéramos hacer una réplica, necesitaríamos de la más sofisticada tecnología de taladros con diamante, algo que está a miles de años de distancia de los "huesos de animales" y "herramientas de bronce" que los arqueólogos modernos sugieren fueron utilizados en la tarea de creación de estas moles en tiempos antiguos.

Aunque una conexión subterránea entre estos países no está probada, nada invalida que esta ruta exista. Sobre Chile y Argentina no cuento con datos más precisos que indiquen presencia de túneles en su interior, aunque no descarto en el futuro se evidencien descubrimientos sobre estos vestigios internos.

Pregunta: Estos túneles son naturales o fueron construidos y/o modificados artificialmente, si es lo último, ¿quiénes son los constructores?

Respuesta: Estos túneles son en su mayoría obra de la naturaleza, aunque acondicionadas por la mano del hombre, sobre esto último, remito nuevamente a los trabajos de Anselm Pi Rambla, a mi entender el más completo en su género, atestiguando una técnica avanzada e inusual, excediendo conocimientos que se suponen alcanzaron las civilizaciones desarrolladas dentro del continente sudamericano.

Esta afirmación temeraria establece un enigma insoslayable, que tiene a estos túneles como su máxima expresión. Una obra ciclópea de esas características requiere necesariamente de varios campos del saber, como por ejemplo matemática, arquitectura, astronomía, así como de amplias nociones en el área de la escritura, materia que a decir de los academicistas, no alcanzó en América un nivel superior, como el atestiguado en otras culturas del globo, caso Sumeria y Egipto.

Negada la escritura, así como la tecnología empleada, además del reconocimiento de una civilización avanzada diferente a las estudiadas en la región, todos puntos que exasperan a los especialistas por las implicaciones a nivel histórico que obligan a una revisión, cabe preguntarse si estos túneles son originarios de este continente, herencia de una cultura perdida autóctona aún no revelada, o fueron edificaciones subterráneas aisladas, realizadas en un momento especial por una civilización foránea venida quién sabe de dónde, o si su presencia se vincula con esas continentes desaparecidos, pista esta última quizás la más cercana, aunque por el momento el enigma continúa.

Pregunta: ¿La evidencia hallada en la Cueva de los Tayos, esas láminas metálicas que contendrían el resumen de la historia de una civilización extinguida, fue destruida o perdida? ¿Acaso no es sospechosa esta desaparición de evidencia que pondría en la cuerda floja a la historia oficial del continente americano, y tal vez del mundo?

Respuesta: Llevo ocho años de trabajo en esta historia, y en su momento hice algunos anuncios públicos, sobre mis hallazgos en Argentina vinculados al tema, actualmente me encuentro preparando un libro, por lo cual muchas cosas debo omitir hasta la publicación del mismo, pero trataré de responder igual tu inquietud.

Hasta el momento la Biblioteca Metálica que Juan Moricz declarara al gobierno ecuatoriano a través de un acta notarial en 1969, nunca fue presentada, continúa siendo un enigma su destino.

De esa colección esquiva sin embargo tenemos algunas pistas, que llevan hacia el Museo fundado en la Iglesia de María Auxiliadora, ciudad de Cuenca, Ecuador. Allí un sacerdote salesiano el padre Carlo Crespi Croce, atesoró durante muchos años extrañas piezas con iconografía muy diferente a las culturas conocidas en el continente, material que le fuera proporcionado por los indígenas de la región. La historia del sacerdote y su misteriosa colección se dio a conocer en el libro de Erich Von Daniken, El Oro de los Dioses, que por primera vez presentó el material al público. En ese texto, convertido en un verdadero best-seller, el investigador suizo brindaba algunos detalles inquietantes acerca del Museo de Crespi, el cual se dice sufrió un incendio intencional que estuvo a punto de acabar con toda la colección. Ese incidente llevó al sacerdote salesiano a extremar medidas, una de las cuales supuso el resguardo de las piezas más valiosas, en su mayoría de oro, en la caja fuerte de un banco. En vida, Crespi, fue objeto de los ataques más virulentos, en especial desde el ámbito académico que no reconoció jamás el valor de ese legado antiquísimo. Cuando Crespi fallece en 1982 el resistido Museo sufre el golpe maestro, embestida en la que estuvo implicada no solo la Orden Salesiana, que a pesar de financiar las actividades del mismo, nunca aceptó la colección, la cual era vista como una anomalía histórica, sino que también el gobierno ecuatoriano fue parte del expolió, ya que muchas piezas fueron fundidas y otras vendidas al Banco Central de ese país, siendo su destino una incógnita.

Crespi mostrando una parte de su misteriosa colección de objetos.

Cuento esta historia como un ejemplo ilustrativo de la problemática americana, al tratar de indagar en su pasado histórico, el cual se remonta antes de la Conquista.

La historia tal cual conocemos sobre el continente americano, habla de una civilización que se encuentra en inferioridad cultural en cuanto a sus pares europeos u orientales, proceso civilizador que consideran superior y, del cual suponen a ésta heredera. América según los especialistas es hija de migraciones, y no se acepta un contenido autóctono que haya generado culturas propias que más tarde hayan podido extenderse hacia otras regiones del globo.

Esa es la discusión que planteaba Juan Moricz, en su único escrito El Origen Americano de los Pueblos Europeos, 1967, donde ya se hacía alusión a esta idea, tesis según algunos, más que revolucionaria. Así como Crespi, Moricz sufrió muchas presiones y persecuciones factor clave para entender porque su descubrimiento “aún sigue en tinieblas”.

El Padre Crespi mostrando otras de las maravillas de su Museo.

Este oscurantismo continúa funcionando, pero América pronto saldrá de esa ceguera, y con ella todo el pasado negado. Este continente tiene un rol que cumplir en materia histórica y arqueológica muy importante, y existen señales que ese movimiento comienza a gestarse.

Pregunta: ¿Actualmente es posible acceder a la Cueva de los Tayos? Se dice que los indígenas Shuar (jíbaros) son custodios de la entrada principal, ¿cierto?

Respuesta: La Cueva de los Tayos es una de las atracciones turísticas más importantes de esa región selvática ecuatoriana, fronteriza con Perú. Miles son los visitantes, curiosos, investigadores, exploradores, en fin, cientos de personas que acuden a los dominios declarados por Moricz en su clásico relato.

Cueva de los Tayos.

En las inmediaciones son recibidos por las etnias de las región, las cuales son varias, siendo la tribu Shuar una de las más prominentes. Ellos trabajan como guías, y conocen el interior del socavón como nadie, desde ese punto de vista aquellos que se acerquen al lugar, necesariamente dependen de la ayuda de estos indígenas, en especial para iniciar el descenso a esas profundidades.

Una de las supuesta planchas provenientes de la Cueva de los Tayos.

Ahora bien, mucho se habla de “custodios de superficie, así como del interior”, en relación a Tayos, lo cual sería entrar en un terreno que roza lo místico. Este es un tema que dejo abierto, y cuyas respuestas espero aportar en mi libro.

Pregunta: Recientemente se han detectado vestigios arqueológicos de la mítica “Ciudad Blanca” en la remota e inexplorada jungla de la Mosquitia de Honduras. Una ciudad que según el explorador estadounidense Theodore Morde que habría dado con ella en 1939, tendría pirámides y extrañas estatuas, entre ellas la de un mono. ¿Nos podría dar más detalles sobre esta ciudad?

Respuesta: Sobre este misterioso enclave hondureño tuve noticias hace un par de años. Tanto me fascinó el tema, que en el 2009 decidí escribir un artículo, “Ciudad Blanca: donde reina el mono dios”. Allí pasé revista a toda esa historia, quizás una de las leyendas más importantes de Centroamérica, la cual describe un ciudad blanca de origen maya, que estaría oculta en la impenetrable Mosquitia.

Por mucho tiempo el relato de esta enigmática metrópolis se tuvo como narración mitológica, hasta que a fines de los años treinta un explorador norteamericano Theodore Morde, emprende una expedición al fin de encontrar la misteriosa ciudad. Declaraciones de la época señalan que el investigador logró cumplir su objetivo, aunque su descubrimiento nunca vería la luz, truncado por un misterioso accidente automovilístico, durante su estancia en Londres…

Con el fallecimiento de Morde el tema entró en un cono de sombras, y un largo silencio se extendió entre los buscadores que trataron de localizar el emplazamiento denunciado por Morde. Durante años, la Ciudad Blanca se convirtió en la meca de muchos investigadores, muchos de los cuales aseveraron conocer su real ubicación, aunque esas denuncias nunca pasaron de rumores.

En la década de los 90’s el tema saltó nuevamente a las primeras planas cuando se infiltró una noticia que daba cuenta del interés de los Estados Unidos por hacerse con el hallazgo. Según se conoció los norteamericanos solicitaron al gobierno hondureño cartografiar algunas zonas de la Mosquitia, lo cual se interpretó como una injerencia de los norteamericanos en ese país, provocando malestar en sus autoridades.

Finalmente llegamos al anuncio producido hace unos meses por los dos países interesados, Estados Unidos y Honduras, que señala el descubrimiento de Ciudad Blanca, manteniendo el secreto de su ubicación evitando así la depredación.

Según los primeros reportes, va a llevar años desenterrar toda el yacimiento que presuponen gigantesco. Desconocemos el alcance de este descubrimiento, que desde ya ayudará a tener una visión más amplia de la historia arqueológica de América, aún desconocida en su totalidad.

Esperamos ansiosos esas revelaciones.

Pregunta: Queremos agradecerle por su tiempo y colaboración para con nuestro sitio web, en esta última pregunta usualmente dejamos que el entrevistado deje un mensaje a los lectores para motivarlos a unirse a la tarea investigativa o a la simple curiosidad… y está no será la excepción. ¿Con qué mensaje le gustaría terminar esta entrevista?

Respuesta: Hay un lema que en lo personal aplico hace mucho, y que dice: “solo creo en mis propias pesquisas”.  Solo háganle caso a su propio instinto, no sigan a nadie.

******* FIN DE LA ENTREVISTA *******